El dolor de rodilla es una afección frecuente que puede afectar a personas de cualquier edad. Existen diversas razones por las que puede surgir este dolor, desde lesiones agudas hasta problemas crónicos.

El dolor en la rodilla puede ser ocasionado por diversas lesiones y condiciones.

A continuación, se describen las causas más frecuentes, tanto agudas como crónicas, que pueden provocar molestias en esta articulación.

> Lesiones Agudas

Las lesiones agudas suelen surgir de eventos traumáticos o accidentes. Son típicas en el ámbito deportivo o en situaciones de esfuerzo físico intenso.

⇒ Lesión del Ligamento Cruzado Anterior (LCA)

La lesión del LCA es común en deportes que implican cambios de dirección rápidos, como el fútbol o el baloncesto. La ruptura de este ligamento puede provocar dolor intenso y una hinchazón rápida en la rodilla. Los síntomas también incluyen una sensación de inestabilidad y dificultad para realizar movimientos normales.

⇒ Desgarros de Menisco

Los desgarros de menisco ocurren cuando la rodilla se gira de manera abrupta mientras se carga peso. Esta lesión puede generar un dolor agudo en la parte lateral o medial de la rodilla, así como dificultad para moverla. La hinchazón también es un síntoma común, al igual que el desarrollo de bloqueos en el movimiento de la articulación.

⇒ Esguinces de Ligamentos

Los esguinces son causados por el estiramiento excesivo o ruptura de los ligamentos que sostienen la rodilla. Dependiendo de la gravedad del esguince, los síntomas van desde un leve dolor y ligera hinchazón hasta una inestabilidad considerable. En casos severos, puede dificultar significativamente la función normal de la rodilla.

⇒ Fracturas en la Rodilla

Las fracturas son lesiones serias que suelen resultar de caídas o accidentes. Una fractura en la rótula o en los huesos circundantes provoca un dolor intenso, así como la incapacidad de soportar peso. El daño puede ser visible a través de deformidades evidentes en la articulación afectada.

⇒ Dislocación de la Rótula

La dislocación de la rótula puede presentarse tras un traumatismo fuerte o un giro repentino. Esta condición ocasiona un dolor inmediato y es visible a simple vista, con una evidente deformidad en la rodilla. Es fundamental tratar esta situación con urgencia para evitar daños adicionales.

> Causas Crónicas

Las causas crónicas del dolor de rodilla suelen desarrollarse lentamente y están relacionadas con el desgaste y el envejecimiento de la articulación. Aquí se detallan algunas de las condiciones más comunes.

⇒ Osteoartritis

La osteoartritis es la forma más común de artritis en la rodilla, resultante del desgaste gradual del cartílago que recubre las superficies articulares. Los síntomas incluyen rigidez matutina, dolor durante la actividad y, en ocasiones, puede haber crujidos al mover la rodilla.

⇒ Artritis Reumatoide

La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmunitaria que provoca inflamación en las articulaciones, incluida la rodilla. Esta condición puede causar dolor crónico, rigidez y limitaciones en el rango de movimiento, afectando negativamente la calidad de vida.

⇒ Tendinitis Rotuliana

La tendinitis rotuliana es la inflamación del tendón que conecta la rótula con la tibia. Suele verse en atletas y personas activas que realizan movimientos repetitivos o intensos. El dolor se manifiesta generalmente en la parte frontal de la rodilla y puede empeorar al realizar actividades físicas.

⇒ Bursitis

La bursitis es la inflamación de las bolsas sinoviales que amortiguan la rodilla. Este problema puede causar dolor en la parte delantera o lateral de la rodilla, especialmente al arrodillarse o permanecer de pie por periodos prolongados. A menudo, la bursitis se presenta junto con hinchazón en la articulación.

⇒ Síndrome de Banda Iliotibial

Este síndrome es común en corredores y ciclistas, generando dolor en la parte externa de la rodilla. Se produce debido a la fricción de la banda iliotibial contra el fémur durante la actividad. Los síntomas suelen agravarse con la actividad física continua.

⇒ Condromalacia de la Rótula

La condromalacia de la rótula es la degeneración del cartílago que se encuentra debajo de la rótula. Esta condición es más común en adolescentes y mujeres jóvenes, así como en personas mayores. Puede provocar dolor al subir o bajar escaleras, así como al estar sentado durante períodos prolongados.

⇒ Lesiones por Uso Repetitivo

Realizar movimientos repetitivos de forma constante, ya sea en el deporte o en el trabajo, puede llevar a lesiones por sobreuso. Estas lesiones afectan la rodilla y pueden intensificarse con el tiempo, causando dolor crónico y limitaciones funcionales.

⇒ Quiste de Baker

Un quiste de Baker es una acumulación de líquido sinovial que se forma en la parte posterior de la rodilla. Este quiste puede causar hinchazón y rigidez, siendo más evidente al doblar o extender la rodilla. En ocasiones, puede ser asintomático, pero si se inflama, el dolor puede ser significativo.

⇒ Infecciones

Las infecciones en la articulación de la rodilla o en los huesos, aunque menos comunes, pueden resultar extremadamente dolorosas y requieren atención médica urgente. Los síntomas pueden incluir dolor intenso, hinchazón, enrojecimiento y fiebre, lo que indica la presencia de una condición grave que necesita tratamiento inmediato.
Ela Torres